Habitualmente nos gusta mucho hacer cosas en familia, pero en vacaciones aprovechamos todo el tiempo que tenemos al máximo. Ya que se aproximan fechas navideñas, os proponemos una actividad perfecta para trabajar con niños.
En esta ocasión os traemos una receta de galletas de Navidad muy sencilla para que puedan participar los más pequeños de la casa en la elaboración. Ellos se lo van a pasar en grande amasando, troquelando y decorando, incluso aprenderán sin darse cuenta a colaborar en las tareas domésticas.
Antes que nada un poquito de historia: Al parecer su origen se remonta a mediados del siglo XVI, cuando la reina Isabel I de Inglaterra las obsequiaba, aunque también hay referencias que la sitúan en Grecia y después en Francia, alrededor del siglo X, o incluso en Alemania. Lo cierto es que se han convertido en un dulce tradicional de Navidad, muy arraigado en Europa. Existen multitud de formas para estas galletas: estrella, abeto, corazón, casa… Pero una de las formas más extendidas es la de muñeco.
Cómo preparar las galletas de Navidad de jengibre y canela:
Necesitaremos:
-250 g de harina
-100 g de azúcar moreno
-140 g de mantequilla
-una cucharadita de ralladura de jengibre
-una cucharadita de canela
-un huevo
-una pizca de sal.
Preparación: Colocamos los ingredientes en un bol. Mezclamos allí la harina, el azúcar, el jengibre, la canela y la sal. A continuación, añadimos un huevo batido y la mantequilla, que debe estar muy blanda para que podamos trabajar con ella (ten en cuenta que debemos hacer una mezcla homogénea). Mezclamos todo con las manos, con ayuda de los niños, hasta tener una masa uniforme. Esta es la parte que más les gusta y donde más disfrutan.
Consejo: si la masa se desmigaja porque nos ha quedado muy seca, podemos añadirle un poquito de leche para que se una bien. Si por el contrario ha quedado muy líquida, añadiremos un poco de harina (no mucha, para evitar que las galletas nos queden duras después de hornearlas).
Cuando hayamos conseguido una masa homogénea, la extendemos sobre una superficie lisa y enharinada (nosotros solemos hacerlo en la encimera, sobre un papel vegetal). Utilizamos un rodillo para extenderla, hasta que quede de medio centímetro de grosor.
Ahora cortamos las galletas. Este es otro momento favorito de los niños. Utilizamos cortapastas que podemos adquirir en cualquier tienda de alimentación, supermercado o bazar. Cualquier forma es buena, pues lo importante es pasar un buen rato y estimular la creatividad de los niños. Nosotros solemos hacerlo con troqueles de estrellas, aunque también moldeamos otras formas manualmente.


Mientras los peques cortan las galletas, encenderemos el horno a 180º C , colocaremos una hoja de papel vegetal sobre la bandeja e iremos poniendo las galletas encima una a una. Cuando las tengamos todas y el horno haya alcanzado la temperatura adecuada (en unos 10 minutos), las pondremos a hornear durante 15 o 20 minutos, pero no más que eso, para evitar que se quemen. En cualquier caso, estaremos atentos a la cocción y cuando estén doradas ya estarán listas.
Cómo decorar las galletas de Navidad de jengibre y canela -opcional-:
Necesitamos:
-1 clara de huevo
-100 gr azúcar glas
-zumo de medio limón
-colorante alimentario
-fideos de colores
La preparación es muy sencilla: batimos primero la clara a punto de nieve y añadimos poco a poco el azúcar glas. Añadimos con precaución unas gotas de limón. Debemos tener en cuenta que cuanto más limón echemos a la mezcla, más blanda nos quedará. La idea, en este caso, es lograr una consistencia maleable para poder dibujar con ella, pero no demasiado líquida.
Añadiremos, si queremos, unas gotas de colorante alimentario, de modo que tendremos que fijarnos en la consistencia de nuestro glaseado. Como se trata de galletas de Navidad elegiremos colores acordes a la celebración, como verde y rojo (el blanco ya lo tenemos, con el glaseado natural). Colocaremos el glaseado de colores en diferentes mangas pasteleras, con la abertura pequeña, para conseguir un trazo fino. Si no tenemos mangas pasteleras, usaremos bolsas de plástico (limpias), cortándolas por una esquina para que la mezcla salga por allí. Dibujamos, dejamos secar y ¡listo!
Si no queréis complicaros mucho la vida con la decoración, lo más sencillo es hacer glaseado blanco o de colores, aplicarlo sobre las galletas con un pincel y espolvorear fideos de colores sobre ello.

Este año nos han salido más chulas… Y MÁS RICAS!!